La humanidad ha conseguido desde un principio desarrollar tecnologías y aprovechar los recursos naturales para abastecerse, expandirse y desarrollarse. Desde el descubrimiento del fuego y su uso para mantener el calor o cocinar, o el aprovechamiento del viento para navegar y moler granos, hasta el del petróleo con las innumerables aplicaciones de sus derivados en tecnologías o como combustibles, o el uso de la energía nuclear. Sin embargo, si queremos si queremos expandirnos más allá de la Tierra y convertirnos en una especie interplanetaria o, incluso, interestelar, los desarrollos energéticos (incluyendo los reactores de fusión nuclear, todavía en investigación) y tecnológicos actuales se quedarán muy cortos, viéndonos obligados a expandir nuestros medios y recursos también al espacio.
En este caso nuestra mejor opción sería la construcción de una Esfera de Dyson, una enorme central energética con la que se podrían obtener cantidades inimaginables de energía, superando por muchos órdenes de magnitud tanto a las mejores centrales hoy en día existentes como a las que todavía están en desarrollo. Esto permitiría proveer de energía no solo al planeta entero, sino también a futuras colonias en otros planetas, así como también la necesaria para su colonización e incluso terraformación, y haciendo de la producción de antimateria (hoy en día tremendamente cara y costosa) algo económico y más simple, pudiendo usarse en motores de antimateria, necesarios para hacer factibles los viajes interestelares y para reducir los larguísimos tiempos de crucero para ir a los planetas exteriores del Sistema Solar.
La Esfera de Dyson, una megaestructura hipotética teorizada por Freeman Dyson, un físico teórico y matemático inglés conocido por sus contribuciones en Electrodinámica Cuántica, física del estado sólido, astronomía e ingeniería nuclear, que consiste en una cubierta esférica de talla astronómica alrededor de una estrella que permitiría a una civilización avanzada aprovechar al máximo la energía lumínica y térmica del astro.
En el siguiente vídeo de Kurzgesagt – In a Nutshell se explica de manera más detallada algunos tipos de estructura de una Esfera de Dyson, así como también un hipotético proceso de construcción de esta loca macroestructura y algunas de sus grandes aportaciones.
En este caso nuestra mejor opción sería la construcción de una Esfera de Dyson, una enorme central energética con la que se podrían obtener cantidades inimaginables de energía, superando por muchos órdenes de magnitud tanto a las mejores centrales hoy en día existentes como a las que todavía están en desarrollo. Esto permitiría proveer de energía no solo al planeta entero, sino también a futuras colonias en otros planetas, así como también la necesaria para su colonización e incluso terraformación, y haciendo de la producción de antimateria (hoy en día tremendamente cara y costosa) algo económico y más simple, pudiendo usarse en motores de antimateria, necesarios para hacer factibles los viajes interestelares y para reducir los larguísimos tiempos de crucero para ir a los planetas exteriores del Sistema Solar.
La Esfera de Dyson, una megaestructura hipotética teorizada por Freeman Dyson, un físico teórico y matemático inglés conocido por sus contribuciones en Electrodinámica Cuántica, física del estado sólido, astronomía e ingeniería nuclear, que consiste en una cubierta esférica de talla astronómica alrededor de una estrella que permitiría a una civilización avanzada aprovechar al máximo la energía lumínica y térmica del astro.
En el siguiente vídeo de Kurzgesagt – In a Nutshell se explica de manera más detallada algunos tipos de estructura de una Esfera de Dyson, así como también un hipotético proceso de construcción de esta loca macroestructura y algunas de sus grandes aportaciones.
Link del vídeo: https://www.youtube.com/watch?time_continue=4&v=pP44EPBMb8A
Bibliografía:
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